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7 de marzo de 2010

Fatiga de Terremoto

Sólo por evitar la demagogia de inundar este espacio con palabras hermosas que pretenden transmitir una solidaridad que se concretaría con hechos no escritos, me limitaré a admitir que me tomó tiempo olvidar el horror del tsunami de Tailandia del 26 de Diciembre 2004 y que esa misma pena se me volvió a despertar con el terremoto de Haití del último 12 de Enero. En ambos casos quedé afectado por la sensiblería humana media que todos compartimos en mayor o menor medida y seguí las noticias con un genuino aunque casi frívolo dolor. Pero, en el caso del terremoto del reciente 27 de Febrero en Chile me pasa algo distinto: quiero a Chile.

Pasé ahí algunos años muy importantes de mi vida y algunas de las experiencias personales acontecidas en Chile me tendrán ligado para siempre con esa tierra y esa gente. Una desgracia o un torneo ganado por algún chileno no me es propio ni tampoco ajeno, y habiendo vivido suaves temblores chilenos bajo mis pies, sé que hablar de solidaridad frente a un terremoto no se acerca ni levemente a recibirla. Menos para un pueblo de a ratos solidario y solitario.

Me gustaría, ya que la colaboración de los generosos de clase media es tan bienintencionada y quijotesca como agregar una cucharada de azúcar al mar, compartir una carta de un amigo a otro que estoy extrayendo de Almacén, el blog de Gillespi:




De: Roger Waters
(Compositor inglés, bajista y vocalista de la mítica banda Pink Floyd)

Para: Hernán Rojas
(Ingeniero de Sonido chileno de trayectoria internacional, productor, músico y conductor de radio)


Carta:
(A continuación, texto completo y traducido gracias a la autorización de Hernán Rojas para el blog de Gillespi)

Estimado Hernán:

Me acuerdo muy bien de ti, como también de los momentos vividos en Chile. Las audiencias chilenas a las cuales entregué mi show no son comparables con ninguna otra.

Qué terrible desastre para Chile.

Te puedo enviar dinero, y lo haré. Hazme saber las mejores maneras de colaborar. ¿Quizás a nivel personal o local? ¿O un cheque a la mayor institución? Esto no es broma… y no pretendo ser cruel, pero si sólo este terremoto hubiera ocurrido antes del de Haití…

No todos, pero muchos de los norteamericanos y las teletones para levantar fondos con celebridades ya tienen “fatiga de terremoto”. No es que les culpe, hacen su mejor esfuerzo, pero pienso que la ayuda para desastres no debiera ser un tema para las organizaciones de caridad y las personas. Debiera ser una obligación global.

¿Por qué no existe un fondo mundial especialmente reservado para satisfacer las necesidades básicas de la humanidad cuando se enfrenten a grandes catástrofes?

Me aventuraré a sugerir que la respuesta es simple. MIEDO.

Los EE.UU. gastan el 40% de lo recaudado por Impuestos a sus ciudadanos en Defensa (Armas). Sobre $1 trillion de dólares por año.

¿Por qué?

¿Por qué le tienen miedo a Sadam Hussein? ¿O Hugo Chavez? ¿O Corea del Norte? ¿O Francia? ¿O México? ¿O Nicaragua? ¿O Irán? ¿O Canadá? ¿O Rusia? Perdón, no Rusia, ahora son nuestros amigos. ¿O China? Oops, ¿perdón nuevamente?

De todas formas, me imagino que ya entiendes mi punto.

He sabido que el costo de ayuda para reconstruir tu maravilloso país es de alrededor de $15 mil millones de dólares, o el 1,5% del presupuesto de defensa de los EE.UU. Aproximadamente el 0,75% de todo el presupuesto combinado de defensa de todas las naciones del mundo.

Imagínate un mundo en el cual el sentido común nos llame mucho más a dar y entregar, que a quitar. Que tengamos más regocijo al construir que en destruir… Más placer al amar que al odiar…

Pero… desafortunadamente… EL MIEDO tiene un aliado, LA AVARICIA.

Las fortunas hechas de la industria del armamento en las naciones desarrolladas desafían las creencias. Nosotros, la gente, alimentamos las guerras a través de nuestra aceptación de la doctrina que Dwight D. Eisenhower llamó "el complejo industrial militar". ¡Por supuesto que no es idea de él, sino que de sus asesores que le escribían sus discursos! De todas formas, también dijo: "cada arma que se fabrica, cada acorazado inaugurado, cada cohete disparado, significa, en el sentido final, un robo a aquellos que pasan hambre y no son alimentados, a aquellos que tienen frío y no son abrigados".

Hay muchos miles ahora en Chile que tiene hambre y no son alimentados, y muchos que tienen frío y no reciben abrigo. Nosotros, los ciudadanos, la gente común, somos los que robamos de todos ellos.

Tu amigo,





PD: ¿Dónde debería enviar los fondos?







22 comentarios:

antonia obiol y corcoll dijo...

Algunos chilenos también te hemos querido... y te seguimos queriendo...

Poco sabemos de lo que ocurrirá, como saldremos de esta... como se verán los parches en los lugares que fueron bellos... como nos acostumbraremos a vivir sin los que se fueron... como se sentirán las medias-aguas en lugares donde había casas... viene el invierno y el invierno es crudo... no sabemos cuantas noches nos levantaran las replicas... la avaricia seguirá instalada en los que gobiernan, en los que roban televisores por que dicen que tienen hambre... tendremos de lo bueno y lo malo... y ahí estará el sol con su respectiva luna... y nada será igual...

Un beso señor Os
(copia del original)

Daniel Os dijo...

Confieso con cierto pudor, amiga Antonita, que tengo el consuelo de los miserables… el consuelo de que los que quiero no perdieron más que la calma.

Un abrazo muy cariñoso, mucha fuerza.
D.

Maga h dijo...

Daniel, la carta de Waters es de alto impacto emocional, agradecida de que la traigas, son de esas perlas que no deben quedar perdidas, de esas cosas de la gente que hacen que uno siga creyendo de que algo mas es posible.
El tema de los presupuestos gastadas para armamento, cuando tanto hambre y frío padecen algunos, aun cuando no han sufrido un terremoto, es algo de lo que solemos cansarnos de hablar y no pasa nada. Agregaría que la misma iglesia con su poderío económico tiene un similar comportamiento y tampoco pasa nada.
El hambre y el frío no es nada nuevo.
De la misma manera que vos he seguido lo sucedido en Chile, nadie a quien le corra algo de sangre por las venas pudo quedar ajeno a esa catástrofe, donde la naturaleza se impuso sin distinciones.


Abrazos.

Daniel Os dijo...

Es así, Magah, y rescato de Waters el espíritu proactivo: "Decime cómo, que te envío dinero"… recién después se pone a despotricar contra el sistema y a buscar el nombre y el apellido de los que deberían hacer algo.

Tengo la impresión de que en unas semanas los terremotos del primer trimestre pasan a ser noticia vieja, celebraremos goles internacionales o nos llenaremos de rabia por un político que se guardó un vuelto… pero del "Fondo Internacional de Rescate Humanitario para Catástrofes" jamás se oirá.

…Y los que sentimos impotencia somos los que de verdad no tenemos que sentir la obligación de reconstruir un país lejano.

Un abrazo,
D.

MAR dijo...

TU SABES QUE SOY CHILENA Y AMO MI PAIS.
EL TERREMOTO FUE HORRIBLE, MI CORAZON SUFRE CON EL DE TODA LA GENTE QUE ESTA SUFRIENDO.
Un abrazo para ti y me encanto tu post.
mar

Daniel Os dijo...

Creo imaginar cómo te estarás sintiendo, Mar, y por respeto a eso es que ni me atrevo a emitir palabras como consuelo o solidaridad porque un verdadero gesto solidario no tiene nada que ver con las palabras que uno ponga en un blog… por buena que sea la intención que acarrean. Me quedo con lo que hace Roger Waters por su amigo.

Sí, puedo desde este modesto rinconcito de internet, intentar reconfortar con una muestra de afecto… ojalá haya franqueado esta vez las barreras virtuales.

Un abrazo fuerte,
D.

SILVIA dijo...

Toda tragedia es injusta y terrible amigo Daniel. y si además nos toca, aunque sea un pedacito, es devastador.
Yo no tengo bienes ni me sobra el dinero, pero creo que la mejor ayuda que puedo prestar en estos momentos, es no permitir que caiga en el olvido. Recordarlo yo, y recordárselo al mundo, con un grito, un poema, una palabra, una carta...
Por eso desde este rinconcito de España, mi solidaridad, mis ánimos y mi fuerza además de mi cariño y mi recuerdo siempre.
Todos somos Chile, porque todos, absolutamente todos, estamos expuestos a la tragedia.
Un fortísimo abrazo querido amigo!!!!

Azpeitia poeta y escritor dijo...

La casa donde vivo en el campo en el sur de españa, es de madera y me la hizo un arquitecto chileno a imagen y semejanza de las que existen en toda la costa chilena, y me la hizo pensando en futuros terremotos que se pueden producir en esta zona...después del desastre en vuestra tierra, entiendo las advertencias que me hacía el arquitecto...Ya he colaborado en la medida de mis posibilidades para Ahití y Chile...un abrazo muy fuerte desde la vieja españa de azpeitia

Daniel Os dijo...

Para bien o para mal, querida Silvia, acá nadie tuvo la culpa. Los terremotos, los huracanes o los deshielos suceden como proceso natural de una roca en formación que no tenemos más remedio que habitar… es nuestro planeta. Que los gobernantes de esta roca puedan haber hecho más o mejores cosas para que la catástrofe se sufra menos, la sufra menos gente o se la asista con más prisa y precisión sí es una injusticia y me temo que la seguirán padeciendo tantas generaciones como futuro tenga la Tierra.

Para los que no somos chilenos ni vivimos en Chile no podemos mucho más que compadecernos con ellos, pero ese “no mucho más” significa averiguar en la Cruz Roja local cómo hacer llegar un poco de dinero, colchones viejos, abrigo, ropa usada, alimentos enlatados, agua embotellada o cualquiera de esas cosas que los mandatarios del mundo no prevén para su gente y nosotros, la gente del mundo, podemos reaccionar aunque sea a destiempo y con las pocas herramientas que tengamos.

Gracias por hacer lo que se pueda desde tu bella España,
D.

Daniel Os dijo...

Debe ser exquisito el lugar donde usted vive, Azpeitia, y además ha sido precavido anticipándose a la catástrofe que ojalá jamás ocurra.

Más aún que eso me contenta que haya colaborado con Haití y Chile. Para los que no somos haitianos o chilenos, no vivimos en esas áreas y también hemos tratado de ayudar, nos queda cierta desazón de enterarnos que en estos últimos días ha temblado el suelo en Argentina, Turquía y Hawaii o que una ola gigante mató a dos pasajeros en un crucero en Francia y no hemos colaborado con esos sufrientes… son más las desgracias que las que podemos acarrear con las monedas personales que manejamos… ¿cuándo harán algo los gobernantes que hemos contratado para que hagan algo?

El mundo se manifiesta a veces como un sitio inseguro… bienvenido, sin embargo, por este rinconcito del mundo.
D.

Mercedes Pajarón dijo...

La ayuda en las tragedias no da tanto dinero como la defensa ante el ataque de, pongamos por caso, el segundo de Al Qaeda. Esa es la triste realidad.

Y vistos los desgraciados ejemplos de los últimos tiempos (el caos de la ayuda a Haití no tiene nombre), Dios nos libre de un desastre como un terremoto, porque estamos totalmente desprotegidos, tanto a nivel nacional como internacional.

Me uno a tu dolor y a tu denuncia.

Daniel Os dijo...

Agradezco mucho que te unas conmigo a la denuncia de Roger Waters, Mercedes. Tal vez el hilito de voz que logremos sumar los no involucrados en las catástrofes sea apenitas mejor que escuchar sólo los gritos de desesperación de los damnificados.

Lo más probable es que no estemos haciendo nada, me acentuaste también mi sospecha de que los daños masivos en territorios poblados son, para algunos personajes, buenas oportunidades de negocios… o simplemente, igual que yo, sos una paranoica adicta a las conspiraciones

Besos y Prozac,
D.

Anónimo dijo...

aparte de estar re fuerte divertido e intelectual tambien apoyas causas??????
FLO

Mercedes Pajarón dijo...

Eeeeeeefectivamente, también soy de las/los que piensan que el hombre no ha estado nunca en la Luna...No tengo remedio.

Sebastián Leonangeli dijo...

Naaaa, que grande Rogelio Aguas!!
Una razón más para admirar a esa bestia de persona.

Daniel Os dijo...

Así es Flo, soy el hombre más atractivo, adinerado y cultivado del mundo y también colaboro con todas las causas nobles de ejemplo para la humanidad. Si sabés de alguna comunidad que ande buscando su líder espiritual pasame los datos que los conduzco.

Gracias por la desmesura,
D.

Daniel Os dijo...

Lamento informarle, joven Merceditas, que el hombre sí llegó a la Luna. Cuento con pruebas irrefutables que me acercó en persona el mismísimo Elvis, que por si no lo sabías, sigue vivo.

D.

Daniel Os dijo...

Así es, Seba, una buena razón para aplaudir fuera del escenario al cantautor que anduvo por el Fluido Rosado.

¿De cuánto habrá sido el cheque?
D.

Claudia Sánchez dijo...

No esperaba menos de usted mire.
Aunque, fatigados o no, siempre me parece que la ayuda que la gente pueda brindar es un grano de arena.
Saludos Amigo!

☀Pau☀ dijo...

No podemos abandonar a los chilenos o los haitianos (que ya se los olvidó todo el mundo) porque es "como echar una cucharada de azúcar al mar"!!! Si todos tiramos una cucharadita no te digo que lo endulzamos, pero que le bajamos la salinidad se la bajamos.
Besitos!!!

Daniel Os dijo...

La verdad que es sólo eso, Clau: un granito de arena. Lo que se ha podido desde la distancia se ha colaborado y también intenté despertar alguna consciencia trayendo hasta acá el ejemplo de Roger Waters... seguramente ese tipo hizo más que yo, y eso que Chile me significa más a mí que a él.

Un beso grande, amiga.
D.

Daniel Os dijo...

Te doy toda la razón, Paulita, querida amiga. No te oculto que en los tiempos que corren es cada vez menos multitudinaria la defensa de las utopías y que ya es hora de ver la acción de quienes tienen mejores y más abundantes medios que los intentos individuales que difícilmente arrastren más que decenas de amistades.

Sin embargo, acá van estas pequeñas cucharadas, lo que logren paliar surtirá mejor efecto que la modorra.

Te mando un beso,
D.

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